LOS AMORES DE LA GATA COQUETA
LOS AMORES DE LA GATA COQUETA

Los amigos son ángeles que sujetan tus alas, cuando estas no pueden recordar como volar. Anonimo











Una semilla germinada con amor, será mañana una hermosa flor...






sábado, 31 de octubre de 2009

Mientras yo te besaba...

Mientras yo te besaba...

Mientras yo te besaba
te dormiste en mis brazos.

No lo olvidaré nunca.

Asomaban tus dientes
entre los labios:
fríos, distantes, otros.

Ya te habías ido.

Debajo de mi cuerpo seguía el tuyo,
y tu boca debajo de mi boca.

Pero tu navegabas
por mares silenciosos en los que yo no estaba.

Inmóvil y en silencio
nadabas alejándote
acaso para siempre....

Te abandoné en la orilla de tu sueños.

Con mi carne aún caliente
volví a mi sitio:
también yo mío ya, distante, otro.

Recuperé el disfraz sobre la arena.
"Adiós", te dije,
y entré en mi propio sueño,
mi propio sueño,
en el que tú no habitas.

Antonio Gala




Poeta español nacido en Córdoba en 1936.
Es licenciado en Derecho, Filosofía y Letras y Ciencias Políticas y Económicas. Ha cultivado todos los géneros literarios, incluidos el periodismo, el relato, el ensayo y el guión televisivo.
Ha obtenido numerosos premios no sólo por la poesía, sino por su valiosa contribución al Teatro y la Ópera.
Calderón de la Barca, Nacional de Literatura, Adonais y Planeta, han sido sus galardones más significativos.
De su obra poética se destacan las siguientes publicaciones: «Enemigo íntimo», «Sonetos de La Zubia», «Poemas de amor» y «Testamento Andaluz».

viernes, 23 de octubre de 2009

Obstáculos



OBSTÁCULOS:


Voy andando por un sendero.

Dejo que mis pies me lleven.

Mis ojos se posan en los árboles, en los pájaros, en las piedras. En el horizonte se recorte la silueta de una ciudad. Agudizo la mirada para distinguirla bien. Siento que la ciudad me atrae.
Sin saber cómo, me doy cuenta de que en esta ciudad puedo encontrar todo lo que deseo. Todas mis metas, mis objetivos y mis logros. Mis ambiciones y mis sueños están en esta ciudad. Lo que quiero conseguir, lo que necesito, lo que más me gustaría ser, aquello a lo cual aspiro, o que intento, por lo que trabajo, lo que siempre ambicioné, aquello que sería el mayor de mis éxitos.
Me imagino que todo eso está en esa ciudad. Sin dudar, empiezo a caminar hacia ella. A poco de andar, el sendero se hace cuesta arriba. Me canso un poco, pero no me importa.

Sigo. Diviso una sombra negra, más adelante, en el camino. Al acercarme, veo que una enorme zanja me impide mi paso. Temo... dudo.

Me enoja que mi meta no pueda conseguirse fácilmente. De todas maneras decido saltar la zanja. Retrocedo, tomo impulso y salto... Consigo pasarla. Me repongo y sigo caminando.

Unos metros más adelante, aparece otra zanja. Vuelvo a tomar carrera y también la salto. Corro hacia la ciudad: el camino parece despejado. Me sorprende un abismo que detiene mi camino. Me detengo. Imposible saltarlo

Veo que a un costado hay maderas, clavos y herramientas. Me doy cuenta de que está allí para construir un puente. Nunca he sido hábil con mis manos... Pienso en renunciar. Miro la meta que deseo... y resisto.

Empiezo a construir el puente. Pasan horas, o días, o meses. El puente está hecho. Emocionado, lo cruzo. Y al llegar al otro lado... descubro el muro. Un gigantesco muro frío y húmedo rodea la ciudad de mis sueños...

Me siento abatido... Busco la manera de esquivarlo. No hay caso. Debo escalarlo. La ciudad está tan cerca... No dejaré que el muro impida mi paso.

Me propongo trepar. Descanso unos minutos y tomo aire... De pronto veo, a un costado del camino un niño que me mira como si me conociera. Me sonríe con complicidad.

Me recuerda a mí mismo... cuando era niño.

Quizás por eso, me animo a expresar en voz alta mi queja: -¿Por qué tantos obstáculos entre mi objetivo y yo?

El niño se encoge de hombros y me contesta: -¿Por qué me lo preguntas a mí?


Los obstáculos no estaban antes de que tú llegaras... Los obstáculos los trajiste tú.
Jorge Bucay, médico y psicoterapeuta gestáltico nació en Buenos Aires en 1949 y es autor del best seller “Cartas para Claudia”, una verdadera introducción al campo de la filosofía gestáltica.
En “Recuentos para Demián” nos sumerge en una cuidada antología de cuentos clásicos, mordernos o populares, seleccionados y reescritos por el autor para extraerles todo su contenido terapéutico.
A este “re-contar” se agrega la didáctica guía del autor que con la excusa de la trama, nos lleva de la mano por el camino de saber más sobre nosotros mismos.
El Doctor Bucay trabaja en Buenos Aires repartiendo su tiempo entre su tarea docente, su tarea literaria y su tarea asistencial. La tarea de “ayudador profesional” como a él mismo le gusta definirse.
Un ayudador – dice el autor – es alguien que ha leído un poco más que unos pocos sobre algunos pocos temas... y ha decidido compartirlo. obstaculos jorge bucay el 3º cabeza acostada.