LOS AMORES DE LA GATA COQUETA
LOS AMORES DE LA GATA COQUETA

Los amigos son ángeles que sujetan tus alas, cuando estas no pueden recordar como volar. Anonimo











Una semilla germinada con amor, será mañana una hermosa flor...






sábado, 29 de enero de 2011

Sobran las palabras


Aprendí a buscarte nada más, sin saber que estabas,
tan adentro mío y más allá, de todo y de nada.
Aprendí a llorarte sin saber, que en cada mañana,
bajabas el sol para traer, luces de esperanza.

Que extraño fue todo ya lo ves, la vida que pasa,
y en la más austera desnudez, sobran las palabras,
sobran las palabras...

Que argumento gris tiene el perfil, de las horas lacias,
desglosando lágrimas de atril, de estériles páginas.
Anda suelto el aire en el pinar, borrando nostalgias,
que extraño fue todo pa que llorar, si hoy se que me amas.

Que extraño fue todo ya lo ves, la vida que pasa,
y en la más austera desnudes, sobran las palabras,
sobran las palabras...

Aprendí a buscarte nada más, sin saber que estabas,
tan adentro mío y más allá, de todo y de nada.
Aprendí a llorarte sin saber, que en cada mañana,
bajabas el sol para traer, luces de esperanza.

Que extraño fue todo ya lo ves, la vida que pasa,
y en la mas austera desnudez, sobran las palabras,
sobran las palabras...

Escuchas este poema en la voz de su autor

José Larralde

sábado, 22 de enero de 2011

Humo


Maquillaba mi esperanza
intacta con esmero
para inaugurar otra noche
llena de posibilidades

Un futuro largo y emocionante
adornaba mi alegría con cuidado
a juego con mis zapatos,
del mismo color que el fular

Tarareaba la música que me recibiría
perfumaba mis sueños
con la esencia que guardaba
para las ocasiones

Y armada de cigarrillo
y barra de labios
salia una noche más
a comerme el mundo

Llenaba de humo las esperas
de domingo a sábado
y me envolvía en humo
aquellas noches...

...nube de misterio, ojos entornados
y cigarrillo en la comisura
aspiraba hondo
para envolverme otra vez en humo

Humo eran esas noches,
humo mi vida.

Texto, voz,
montaje y realización:
Carmen Tobes

sábado, 15 de enero de 2011

poema del pecado



Poema del pecado

“Vamos que se hace tarde”, me dijiste;
pero yo me quedé mirando al mar,
con el hastío de un pecado triste,
pues no hay nada más triste que un pecado vulgar.

Tú, la mujer ajena,
yo, el hombre sin ayer,
ya el mar borró tus pasos en la arena,
pero hay cosas más hondas en un atardecer.

Yo me imagino como fue el regreso,
si ya él estaba allí,
si tú como otras veces, pudiste darle un beso,
y si al besarlo no pensaste en mí.

Y me imagino lo que habrás sentido
si después,
al quitarte el vestido,
rodó un poco de arena hasta tus pies.

Ya sé que fue un pecado
triste y vulgar;
pero el viento soplaba de aquel lado
y se llevó el pecado sobre el mar.

Y al cruzar una acera,
ladrón de cosas que no tienen fin,
para pagarte un beso a mi manera,
fui cortando las rosas de un jardín.

Tal vez mañana,
como hay sueños que han sido y que no son,
tú abrirás como siempre la ventana
y saldrás a esperarlo en el balcón.

Y como una sorpresa,
como una burla fina y cruel,
colocarás mis flores en la mesa,
sin que tiemble tu mano en el mantel.

Tal vez vuelva a la playa
por andar en la arena, no por ti;
ya me dijiste que aunque yo no vaya,
tú irás todas las tardes por allí.

Y si nos tienta algún pecado
triste y vulgar,
el viento sopla siempre de aquel lado
y se lo lleva todo sobre el mar.

De: Poemas prohibidos

JOSÉ ÁNGEL BUESA

sábado, 8 de enero de 2011

Quiero decirte...


Tengo que contarte algo más
pues me doy cuenta que además
mi voz se apagó
tal vez porque tú y yo...

Quiero decirte que
he mantenido algo oculto en mi
no se como decirtelo
hay un amor en mi...

Me abandono a ti
pues estoy solo para ti
cuando estas junto a mi
comienzo a vivir

Quiero decirte
que me abando a ti
tal vez por que algo oculto en mi
un amor que no debe salir

Quiero decirte
que soy solo para ti
te quiero aqui
hasta morir.

Siendo imposible
mi sueño eres tú
es decir tú y yo...
quiero decirte...mi amor.

Autor Uberdiana

sábado, 1 de enero de 2011

De pie bajo la lluvia



Nocturno IV

Así estás todavía de pie bajo la lluvia,
bajo la clara lluvia de una noche de invierno.
De pie bajo la lluvia me llega tu sonrisa,
de pie bajo la lluvia te encuentra mi recuerdo.

Siempre he de recordarte de pie bajo la lluvia,
con un polvo de estrellas muriendo en tus cabellos
y tu voz que nacía del fondo de tus ojos
y tus manos cansadas que se iban en el viento
y aquel cielo de plomo y el rumor de los árboles
y la hoja aquella que te cayó en el seno
y el rocío nocturno dormido en tus pestañas
y engarzando diamantes en tu vestido negro.

Así estás todavía lejanamente cerca
desde tu lejanía de sombra y de silencio.
Mi corazón te llama de pie bajo la lluvia,
de pie bajo la lluvia te acercas en el sueño.
La vida es tan pequeña que cabe en una noche.

Quizá fue que en la sombra me encontré con tu beso
y por eso me envuelve, de pie bajo la lluvia,
el sabor de tu boca y el olor de tu cuerpo.
Si, me has dejado triste porque pienso que acaso
ya no estarás conmigo cuando llueva de nuevo.

Y no he de verte entonces de pie bajo la lluvia
con las manos temblando de frío y de deseo.
Pero aunque habrá otras noches cargadas de perfumes
y otras mujeres, y otras, a lo largo del tiempo,
siempre he de recordarte de pie bajo la lluvia,
bajo la lluvia clara de una noche de invierno...

José Ángel Buesa